Aceptar solo efectivo ya no es una opción. En un estado como Quintana Roo, donde el turismo, el comercio local y la digitalización avanzan a la par, tener un método de cobro digital puede definir si un cliente se queda… o se va. Muchos negocios pierden ventas solo por no ofrecer una forma rápida y segura de pago.
Existen opciones sencillas y económicas: desde apps que te permiten generar links de pago, hasta terminales físicas sin renta fija. Incluso hay soluciones diseñadas especialmente para pequeños comercios. Si ya tienes redes sociales para vender, integrar un botón de pago o enviar cobros por WhatsApp puede facilitar todo el proceso.
Pero no es solo por conveniencia. Los cobros digitales te permiten llevar un mejor control de tus ingresos, dar comprobantes de forma automática y generar confianza. Además, abren la puerta a promociones, cobros a distancia o automatización de pagos recurrentes.
Si aún no tienes una opción digital, estás llegando tarde. Adaptarte no es solo seguir la tendencia: es responder a lo que tus clientes esperan de ti. No dejes que tu método de cobro sea una barrera.
